hacia abajo, podrían ser de lenguas. pero aún así siguen siendo torres, lo mires por donde lo mires, como todo. esbeltas, elegantes e incomunicadas. pero al mismo tiempo toscas, frágiles y vulnerables a cualquier chispa que se precie.
tan insignificantes , y tan importantes.
por qué nos concentramos en destruirlas?
por qué matamos por estar arriba y no nos preocupamos de lo que pasa abajo?
no es mejor ocuparse primero de los cimientos?
2 comments:
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No conocía ese dibujo de Escher....supongo que los cimientos (en sudamerica los llaman "fundaciones", por algo será) son aburrridos tediosos, es el trabajo sucio, no luce...aunque sean básicos para la estabilidad d elo que encima de ello se levante.
Musus
ya, es verdad...suele pasar que lo que cuesta trabajo no nos gusta nada...que cosas. a ver si lo cambiamos.
muxus