de pequeñita les tenía mucho miedo porque no me gustaba nada la caída. subes tranquilamente, llegas muy alto, y cuando menos te lo esperas, zas! empiezas a caer a una velocidad de vértigo sin poder parar. entonces gritas y gritas, como esperando que alguien lo pare,y te saque de allí, pero entonces es cuando empiezan las curvas, los giros y nuevas bajadas. en algun momento vuelves a subir y te estabilizas un poco, pero luego vuelves a caer, más rápido todavía...y por el camino se te revuelve el estomago, la mente y pierdes el sentido de la ubicación. no sabes si estás arriba, o abajo, si subes o bajas. a algunos les sube la adrenalina, a otros les produce un miedo incontrolable. yo de pequeñita estaba en el segundo grupo. y ahora...
mi vida ultimamente es como una montaña rusa. subo y bajo tan rápido que ni me doy cuenta. ahora mismo no sé ni donde estoy. cuando ya pensaba que ya se había terminado, vuelvo a caer.
...espero que sea la definitiva, porque ya estoy más cerca de la séptima...
en estos últimos días no sé cuántas veces he pensado esto, mientras deseaba tener un reloj de esos que atrasan el tiempo...cambiaría taaaantas cosas...
que injusta es la vida a veces (muchas), a pesar de que luches y luches...
dicen que no importa cuántas veces te caes o la vida te empuja y te tira al suelo, sino cuántas veces eres capaz de levantarte. unas veces te cuesta más, otras menos, y otras tienen que ayudarte.
no te hundas. no merece la pena. el fondo es muy oscuro, muy triste, y da miedo. yo te empujaré desde allí.